
Me llamo Sergio R.-Solís y tanto yo como la gente con la que trabajo, hemos dedicado toda nuestra vida profesional a la tecnología y a la seguridad y a la formación.
La principal lección que hemos aprendido con el paso de los años es que la seguridad no es un estado que se pueda alcanzar, sino el proceso continuo de análisis, ejecución y evolución que ponemos en práctica para que nuestras vidas, la privada y la profesional, funcionen como planeamos, sin sobresaltos.
La seguridad no es una acción, es un proceso vivo y continuo. No es un gasto, es una inversión en tranquilidad.
